28.7.10

29 de Julio


¡¡¡Auxilio!!!¡¡¡Son 70!!!

14.7.10

Carlos Alberto Boaglio
Nació en Las Varillas (provincia de Córdoba) el 1° de abril de 1958.
Es profesor en Lengua y Literatura.
Está radicado en Vicuña Mackenna, provincia de Córdoba.
Poeta, narrador, dramaturgo, director y actor teatral.

Ha recibido innumerables premios y reconocimientos
por su incesante trabajo en el ámbito local, provincial y nacional.

"CUANDO YO ME VAYA"

Cuando yo me vaya, no quiero que llores,
quédate en silencio, sin decir palabras,
y vive recuerdos, reconforta el alma.

Cuando yo me duerma, respeta mi sueño,
por algo me duermo; por algo me he ido.


Si sientes mi ausencia, no pronuncies nada,
y casi en el aire, con paso muy fino,
búscame en mi casa,
búscame en mis libros,
búscame en mis cartas,
y entre los papeles que he escrito apurado.


Ponte mis camisas, mi sweater, mi saco
y puedes usar todos mis zapatos.

Te presto mi cuarto, mi almohada, mi cama,
y cuando haga frío, ponte mis bufandas.
Te puedes comer todo el chocolate
y beberte el vino que dejé guardado.
Escucha ese tema que a mí me gustaba,
usa mi perfume y riega mis plantas.


Si tapan mi cuerpo, no me tengas lástima,
corre hacia el espacio, libera tu alma,
palpa la poesía, la música, el canto
y deja que el viento juegue con tu cara.
Besa bien la tierra, toma toda el agua
y aprende el idioma vivo de los pájaros.


Si me extrañas mucho, disimula el acto,
búscame en los niños, el café, la radio
y en el sitio ése donde me ocultaba.


No pronuncies nunca la palabra muerte.
A veces es más triste vivir olvidado
que morir mil veces y ser recordado.


Cuando yo me duerma,
no me lleves flores a una tumba amarga,
grita con la fuerza de toda tu entraña
que el mundo está vivo y sigue su marcha.


La llama encendida no se va a apagar
por el simple hecho de que no esté más.


Los hombres que “viven” no se mueren nunca,
se duermen de a ratos, de a ratos pequeños,
y el sueño infinito es sólo una excusa.


Cuando yo me vaya, extiende tu mano,
y estarás conmigo sellada en contacto,
y aunque no me veas,
y aunque no me palpes,
sabrás que por siempre estaré a tu lado.


Entonces, un día, sonriente y vibrante,
sabrás que volví para no marcharme.



Me identifico en este poema.






3.7.10




Ya sé, es nada más que un partido de futbol, pero no tengo palabras
para expresar el estado anímico que tengo.
Quería que ganásemos, por el país, por la gente que confió, por los que fueron y siguen siendo detractores y vapulearon a Diego,
por los contra que son contras de todo.
Porque era importante para Sudamérica, porque era aliento para
seguir en la lucha por tantas cosas importantes.
Parece que lo que digo es una melange de ideas y es así nomás.
Estoy triste.

Esperemos que Uruguay siga en carrera y traiga para este Sur el
galardón tan esperado.